Madrugar con la noticia que es tu último día, que por más que corras, el cuento no tiene un final feliz, que necesitar de otro siempre va a ser una carencia, que no existe lo que se anhela, que no se anhela sin antes imaginarlo, que imaginarlo es escapar, que escapar es afirmar que no sos feliz.Y cómo quiere uno ser feliz, si madruga con una mala noticia.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Perturbación anímica producida por una idea fija, que con tenaz persistencia asalta la mente

 Era una obsesión. Tenía sus ojos, su torpeza y sus cromos. Me di cuenta que era obsesión una tarde que, como un ensordecedor ruido de tren, su rostro fue acercándose a mi mente una vez, después otra y otra hasta que formó parte de mi ceguera. Era una obsesión que andaba en alpargatas y vestía como artista, o sea, como se le cantaba. Se reía a carcajadas con la boca abierta sin miedos y hacía caras que no podían merecer palabras, solo sentimientos. Eran emociones-rehenes. Eran sus cejas y pómulos condicionando todos mis modales a la vez. También me di cuenta que era obsesión su música.
Me hallaba inmensamente cómodo en el color de las uñas, pero al mirarle las manos escuché a todo el mundo gritar su nombre y desvié la mirada. Me asusté.
 La voz era melodía, su imaginación era el viento mismo. Entonces yo era espectador y era frágil.
¡Su pelo!
  Era gracioso pensar que esa obsesión tenía su obsesión a la vez, independiente a la mia; era (la idea de) una heroína de celuloide.
 Esa obsesión es papel. Ahora emerge la incertidumbre de saber si puedo convalecerla o no, si el papel la somatiza o la saca a pasear por la frontera de la locura. Pero esta es otra obsesión, ya.

martes, 30 de agosto de 2011

Caspa


Es sabido que Las Poesías gozan de pésima gravedad. A ellas les encanta ir y venir, levitar, volar por todas partes desobedeciendo modales y techos. Tal es así, que Las Nubes comenzaron a quejarse, renegando, que las depravadas Poesías, cuando pululan por los cielos, les muerden las nalgas.  Las Estrellas avergonzadas lloran de cólera cada noche  cuando Las Poesías arriban embriagadas rimando en grupo y haciendo ruidos extraños e insinuando ideas pícaras, desentablando, así, discusiones violentas y absurdas. Nadie se imagina como logran distraer a Los Cometas, pero estos siempre que las ven salen de su trayectoria habitual, se creen canicas y empiezan  a rodar por el universo poniendo locos a los astrónomos que los estudian. En este contexto se escribió la siguiente carta:

De vuestra consideración:
                                               Es nuestro deber informar que dado a los comportamientos incatalogables de Las Poesías hemos sancionado las siguientes medidas. A saber:

I)                   La altura límite máxima establecida y permitida para el vuelo de una poesía es de no más de setenta y un kilómetros. Aceptando un margen de tolerancia de un cuarto de la unidad anteriormente citada.
II)                 Cualquier impropicio para con los astros será vigorosamente multado con penas que van desde los diez hasta la totalidad de caracteres tachados (espacios incluidos).
III)              La estadía de las poesías no podrá superar, bajo ningún tipo de circunstancia, siete horas consecutivas. De lo contrario se aprehenderán a todas aquellas que así lo hagan y se procederá a retarlas de modo severo.
IV)              El Cielo se reserva el derecho de admisión.

 Saludos cordiales.
                                   A.D.A.U (Asociación De Astros Universales)

La respuesta por parte de Las Poesías no se dejó esperar.

Estimados contertulios:
                                               Nos encontramos íntimamente deprimidas por su manifestación, cual mar sin peces. Varias de nosotras están convaleciendo en libros de Copérnico. Su decisión nos ha devastado. Es que forma parte de nuestro comportamiento volar, sonreír y salpicar con nuestras letras a los astros. Sentimos emociones muy intensas cada vez que vibramos en el cielo planeando sin rumbo, como para dejar de hacerlo. Porque con cada viaje creamos mermeladas de colores y melodías  y porque en cada vuelo nos sentimos plenas y libres. Hemos decidido, como siempre, perseguir los productos de nuestra imaginación y enhebrar nuevos senderos en otras geografías. Han entendido perfectamente. Nos mudamos del planeta.

 Epifanías para todos.
                                   Las Poesías

Los Astros ganaron esta vez, pero Las Poesías, sin embargo, no perdieron. Fortalecieron. Decidieron marchar, independizarse de algún modo de esos astros rígidos y conservadores que con pretextos de paz, cancelaron su vida y métrica. Tristes astros que extrañan ese desorden, ese manoseo que los enloquecía. Ahora Las Nubes están delgadas, anoréxicas porque nadie les muerde las nalgas; Las Estrellas son estatuas con luces tenues y ególatras; Los Cometas son una función lineal en un eje cartesiano y tienen bigotes dentro de sus cabezas que subrayan su fantasía onírica.

lunes, 6 de junio de 2011

Estima



Resulta que uno tiene la maña de tomarle cierto cariño a las cosas y no estoy hablando de ese cariño que alguna vez explicó la maestra de quinto grado, me refiero a sentirse como la mierda cuando se entra a ese lugar y le han ocupado el asiento y el asiento donde uno va cuando el primer asiento está ocupado. En síntesis, el ambiente está lleno y uno no puede sentarse a gusto. Lo que se cataloga como "un bajón". Hasta que se desocupa el asiento y la silla parece llamarnos, gritar nuestro nombre y llega gente sentándose en otros lugares invitándonos indirectamente a apoyar la nalgas donde siempre, pero ya es tarde, porque hemos intimado, nos gusta como el sol pasa por esa ventana, nos entretiene ver las mismas cosas desde otro ángulo y ya no queremos ir a sentarnos en aquella silla que está sola y vacía esperándonos.

jueves, 19 de mayo de 2011

(que la razón no asegure) lo que la imaginación provee







Hubo una vez una señora que no salía a la calle por temor a que se le cayera su nariz. Ella estaba tan segura que pisando la vereda, plop, se le desprendía su nariz, que pasaba todo el día en su casa. Por más que trataron de convencerla no hubo forma, ella no quería. Cierta tarde a alguien se le ocurrió mostrarle una cajita argumentando que podía salir a la calle y en caso que se desplomase su nariz salvaguardarla dentro. Así fue como la señora comenzó a caminar con cautela por el barrio con su cajita en las manos. En el período que empezaron a manifestarse mejorías y ya pensaban permutar la cajita por un pañuelo, un psiquiatra la medicó y la internó en un geriátrico del cual nunca quiso ni pudo salir.

lunes, 16 de mayo de 2011

Discuciones Orgamentales


-¿Ahora también fumás?-
-Sí, como vos.-
-Si yo no fumo. ¿Qué decís?-
-Lo hacías a mi edad. Todo el mundo hace algo estúpido con sus vidas cuando es joven. Después crecen, tienen hijos y los retan cuando hacen algo que no les gusta. Es algo natural, muy natural que alguien haga algo estúpido.-
-Bueno pero bajá el tono- respira y comienza a hablar pausadamente- Sabés que te hace mal, tratá de soltarte de esos vicios ó malos hábitos que tenés. Y otra cosa, soy tu conciencia, no tu familia.
-¿Qué decís?-
-Lo que está tratando de explicar es que te referís de una forma algo extraña a tu conciencia. Le hablaste como si fuera tu mamá. ¿Entendés?-
-¿Y vos quien sos?-
Conciencia:-¿A qué no adivinás?-
Esternón:-Soy tu esternón. Ni más ni menos.-
-¿Qué?-
- El esternón es un hueso que…- Interrumpen.
-Y vos quién sos. El que me habla del esternón. ¿Quién es ese?-
Glóbulo Rojo:- Yo soy un glóbulo Rojo, pero pensame como alguien que pasa todo el día en una montaña rusa.-


-¿Cómo es eso que no siempre estuviste en mi cuerpo?-
GR:- Lo que te quiso decir es que como hay enfermedades que se contagian, también hay voces que pululan de un lugar a otro y no siempre son las voces de los mismos órganos. Cuando en tu cuerpo tenés un número elevado de voces de órganos, estas te empiezan a hablar. Yo antes de estar en tu cuerpo era la idea de mesa que tenía un carnicero; cada vez que el carnicero pensaba en “mesa” yo me tenía que adoptar, pero como eso pasa muy seguido, me cansé de ser idea de mesa y me vine a tu cuerpo a ser voz.-
C:-… Y eso es más o menos lo que nos pasa.-
E:- y creo que estamos todos de acuerdo que a lo mejor te podemos  ayudar. ¿No es así, gente?-
Nadie responde
E:- Bueno, váyanse al carajo y no me jodan más.-
-Pará, Esternón. ¿A dónde vas?-
E:- A dar una vuelta, no trates de ubicarme.-
Apéndice: Hola vieja, soy la voz de tu apéndice. No les des bola al esternón ese, es un gil, vo.-
-¿Apéndice? Si a mi me operaron de la apéndice cuando era más chico.-
A:-A ver, nene.- casi enojado:- Ahora resulta que como el señor no tiene apéndice no puede tener voz de Apéndice… ¡No! No estoy en tu apéndice, tontito. Tontito, bobo. BOBO, estúpido, sos bobo, vo-vo. Careta.
-No sabía Apéndice, perdomame.-
A:- Todo peola wachín. Sino, ya sabés como lo podemos arreglar, vo-
C:-¡ Tampoco lo tratés así!-
A:- ¡¿Qué lo defendés?! Hace un rato le dijiste que no eras la vieja…y ahora lo defendés. No la agités. Hacete ver, vo.-
C:-No, no, no, eso no. No te lo voy a permitir. No te lo voy a permitir.-
-Bueno, no se peleen. Bastante tengo que soportar allá afuera como para que se peleen dentro mío o afuera o donde estén.-
A:-¿Y Quién te pidió opinión?- imitándolo - ¡Ay, yo soy de carne y hueso y quiero la paz mundial! Bla, bla, bla…-
Interrumpe una voz profunda, se torna lúgubre el ambiente.
-¿Qué pasó acá?-
Nadie contesta. Silencio pesado. Vuelve a insistir:
-Que pasó acá a la una, que pasó acá a las dos…-
A:- Perdón, se me fue la mano, vo.-
-El único que perdona es Dios, y yo no soy Dios.-
A:- Mil disculpas Corazón. Mi forma de proceder ante un intercambio de ideas fue bastante violento y mi humor no siempre es el mejor para con mi individuo.-
Corazón:- ¡Callesé la boca, Apéndice! Es suficiente. Hasta luego.-
Todos los órganos:- Hasta luego, Corazón.-
Luego de un largo silencio, pregunta:
-¿Quién fue ese?-
Gr:- Esa es la voz del Corazón.-
-¿Y por qué lo respetan? ¿O le tiene miedo?-
A:- Miedo nunca, respeto si. El es el único que puede matarnos, vo.
-No te tenía con tanto vocabulario a vos. ¿Cómo matarlos?-
Gr:- El Corazón es lo que el rey en el ajedrez, pero también es él quien decide de nuestras idas, rotaciones y sanciones es este cuerpo.-


-Dos por una, dos; dos por dos, cuatro; dos por tres…dos por tres…seis, llueve, amarillo.-
E:- Es el Hígado, lo encontré en la esquina solo y lo traje para acá.-
-Lo que me faltaba, la voz de mi hígado.-
H:- Hola señor. Tengo hambre.-
-Bueno.-
H:- Deme una galletita con forma de unicornio.-
E:- Hmm-susurrando- El Hígado, cómo explicarte, no tiene…no vive en un mundo como el nuestro.-
H:-¡Quiero hacer caca!-
E:-Hígado es especial.-
-Sí, ya veo.-
H:-Quiero hacer caca en la boca del unicornio con forma de galletita.-
-¡Sí, ya veo!¿Qué querés ser cuando seas grande y fuerte cómo el Corazón, Hígado?-
H:-Juez de paz.-
Gr:- Vaya ironía, va a pasar de hacer caca en la boca de un unicornio a, directamente, garc…-interrumpen.
C:- Creo que todos pensamos masomenos lo mismo, sí.-
-La salida ¿Por dónde era?-

lunes, 18 de abril de 2011

Julio, el electrón







Julio vivía tranquilo en su casa de zinc. Pasaba el rato jugando con sus hermanos, rodando día y noche sin parar. Por mas que corriera nunca alcanzaba a ninguno de ellos, cada uno estaba en espacios diferentes, digamos en diferentes órbitas.
 Cierta tarde sintió euforia, un impulso que lo sacó de su hogar, lo arrastró con violencia y sin querer empezó un viaje rápido. Luego de atravesar un sendero angosto de cobre rodeado de colinas plásticas, corrió un callejón de cerámica. Se consideró dichoso al finalizarlo, ya que en su trayecto, varios como él quedaron atrapados y se transformaron, en lo que más tarde conoció como calor. Julio no entendía el sentido del viaje. Esta aventura de rutas de cobre, nubes de estaño y monstruos integrados de varias patas, lo agitaban demasiado.
 Se fue nublando todo el panorama y reposó varias horas en un colchón de poliéster. Se había hecho de noche. Allí se enteró de su porvenir. Según rumorearon, todos eran parte de una rutina. Un viejo explicó detalladamente que estaba dentro de un circuito aburridísimo del cual era víctima desde tiempos remotos y siempre pasaba lo mismo, una agonía perpetua de ir y venir por todos lados.
 Apenas sintió un frío temor por lo enterado, lo envolvió otra vez esa vieja sensación de euforia, una excitación que le obligó a continuar su rumbo. Primero pasó un pabellón de germanio mientras se acercaba desde el horizonte un lago de silicio. Por esas cosas de la vida, se vio amontonado con otros en lo que parecía un gigantesco anillo. Se percibía una locura colectiva, todos sufrieron un empuje atroz. Salió despedido a una gran velocidad y pasó a través de obstáculos que lo golpearon no pudiendo distinguirlos de los fugaces que fueron. Asustado por su futuro, no pudo evitarlo y comenzó a llorar. Lloró como nunca antes había llorado en toda su vida. Lloraba desde el alma, desde el corazón, con ganas y espasmos. Lloraba por todos sus poros. Un llanto desesperado había conjurado angustia en su ser. Justo cuando sentía el fin de la vida, comenzó a llover. Llovía una pintura verde, verde silicatodefósforo y en una eternidad que duró un instante Julio estaba empapado de verde, y como él, otros miles más. Una vez escampado el chaparrón, sufrió una experiencia única, desfiló por una pasarela de vidrio y vio como era observado por seres enormes, deformes, que no le quitaban la vista de encima; ojos que parecían municiones de cañón. Se sintió intimado por los gigantes que estaban del otro lado perplejos por su paseo, mas no vaciló y continuó su ciclo.
 Julio falleció a la edad de ciento tres mili segundos por causas naturales: las fatigas y las sesiones de duchas verdes carcomieron lo mejor de su humor. Nunca se enteró o creyó ser un electrón. Estimaba que la vida no revela su propósito a quien cumple con su vocación. Tranquilamente pudiese haber nacido astilla, glóbulo rojo o bacilo de koch, pero nació electrón y como electrón murió, absurdo.



miércoles, 6 de abril de 2011

Terapia Telefónica



-Hola ¿Estela? ¡Ah! Está bien ¿Y a qué hora vuelve? Perfecto. Entonces dígale, por favor, que llamó Luis y que es por el asunto de la escribanía. Muchas Gracias. Adiós.

-Este es un mensaje para Daniel Burreti; favor de acercarse para tomar un café pendiente en cualquiera de nuestros bares. ¡Nunca te encuentro, Dani! Siempre me atiende este contestador…llamame y organicemos algo, dale. Un abrazo.-

-¡Andrea, no me cortés! Sí, sí, es tardísimo. Oime, desde un público te estoy hablando. Ya se, ya lo se. Dejame explicarte. Yo tuve la culpa, pasa que no había sido un buen día y vos quizás insististe un poco… ¿Hola? ¿Andrea, estás ahí?

-…Es que a veces uno se cansa de dar siempre las mismas noticias. Cambian los nombres, las fechas, los domicilios. Pero las noticias son las mismas. Las malas son las que me demandan más tiempo. Eso si, la gente nunca se disculpa; el otro día tuve que poner un “perdón” o se lo saqué de la boca, no recuerdo. En ese momento se tranquilizó la conversación. De vez en cuando me llevo alguna, por ejemplo que nació alguien o  que una persona está contenta que consiguió trabajo. Los tiempos ya no son los mismos, me cuesta concentrarme y eso la gente lo siente. No se da cuenta, pero lo siente; vive los silencios del otro lado. Son esos silencios cortos pero incómodos.
 Sí, me tratan mal: me cuelgan, me cortan, me golpean, me gritan, me lloran y hasta me estornudan. Y uno siempre tiene que funcionar porque sino no recibe la moneda. Aunque a veces  hago trampa. Me hago el roto y me quedo con algún centavo. Otras veces ellos se los olvidan en mí. Pero nunca falta el que mete la mano en la lata.
 No, no, al contrario, me veo como una in-comunicación, siento que no queda pulso para mi vida ¿Me entendés? A ellos les juega en contra, soy el médium que acorta distancias evitando que se miren o que se toquen. Con el tiempo me acostumbré y me acepté… y me aceptaron. Me toman como lo que soy.
 ¡No me hagas reír! Nos pasa a todos. A mi también me llevaron y estuve algunos días en esos servicios técnicos. Son como mis vacaciones, me relajo, descanso y siento que no soy el único ¡No soy el único! Pero acaso sino te hablan ¿Qué hacemos?
 Tuviste suerte. Yo me sentía solo, no puede pasar más de una hora sin que alguien me hable. Te imaginás cómo la pasé esos días fuera de servicio. Luego me mudé, anduve por kioscos, hospitales, ferreterías y a la intemperie también.
 Te tengo que dejar. Está viniendo una mujer que llama a su amante, y después a su marido. Hablamos. Que sigas bien.

lunes, 4 de abril de 2011

The story of an artist - Daniel Johston

Listen up and I'll tell a story
About an artist growing old
Some would try for fame and glory
Others aren't so bold

Everyone, and friends and family
Saying, "Hey! Get a job!"
"Why do you only do that only?
Why are you so odd?

We don't really like what you do.
We don't think anyone ever will.
It's a problem that you have,
And this problem's made you ill."

Listen up and I'll tell a story
About an artist growing old
Some would try for fame and glory
Others aren't so bold

The artist walks alone

Someone says behind his back,
"He's got his gall to call himself that!
He doesn't even know where he's at!"

The artist walks among the flowers
Appreciating the sun
He does this all his waking hours
But is it really so wrong?

They sit in front of their TV

Saying, "Hey! This is fun!"
And they laugh at the artist
Saying, "He doesn't know how to have fun."

The best things in life are truly free
Singing birds and laughing bees
"You've got me wrong", says he.
"The sun don't shine in your TV"

Listen up and I'll tell a story
About an artist growing old
Some would try for fame and glory
Others aren't so bold

Everyone, and friends and family
Saying, "Hey! Get a job!"
"Why do you only do that only?
Why are you so odd?

We don't really like what you do.
We don't think anyone ever will.
It's a problem that you have,
And this problem's made you ill."

Listen up and I'll tell a story
About an artist growing old
Some would try for fame and glory
Others just like to watch the world.